Guía rápida para cuidar tus finanzas personales

Una de las grandes ventajas de esta era digital es que existen aplicaciones para absolutamente todo. Si se trata de dinero, en la App de BBVA tenés una sección donde podés organizar tus finanzas personales, además podés vincular tus cuentas bancarias y tarjetas de crédito, registrar tus gastos y recibir notificaciones sobre tus movimientos financieros en tiempo real.

Por supuesto, también es muy útil bancarizar dinero y utilizar todas las herramientas de ahorro que te ofrecen los bancos. Con ellas tu dinero siempre está seguro y tenés un sinfín de opciones para pagar en el momento que lo necesites.

En BBVA contamos con una sección de finanzas personales la cual te permite registrar tus movimientos financieros cada mes, establecer tu presupuesto personal y ayudarte a ahorrar. Mi día a día, de BBVA, te ayuda a hacer un seguimiento detallado del estado de tus cuentas.Uno de sus principales beneficios es la categorización de gastos para entender en qué estás destinando tu dinero y cómo cuidarlo de manera más eficiente. Además, en la aplicación podés ver claramente cuánto dinero ingresa en tus cuentas, facilitando la gestión de tus finanzas.

Tomá mejores decisiones financieras con “Mi día a día”. Conocé más sobre esta herramienta de BBVA en este video.

Tus finanzas personales se construyen en base a tus ingresos, por lo tanto, para cuidarlas necesitás registrar cada uno de ellos. Si tenés un sueldo fijo es muy fácil elaborarlo, pero si sos emprendedor/a, trabajador/a independiente o dependés de ingresos variables, es fundamental considerarlos todos en un plan de finanzas personales en Excel.

Con esto podés darte cuenta de tu realidad financiera. Comúnmente, muchas personas desconocen su situación hasta que lo ponen en papel y comienzan a pensar posibles cambios que motiven soluciones.

Para mejorar tus finanzas personales, definitivamente tenés que establecer metas de ahorro realistas. Ya sea para emergencias, vacaciones o la compra de bienes, necesitás un fondo de ahorro. Una buena opción es automatizar tus transferencias hacia tu cuenta de ahorro cada mes para asegurar que nunca dejes de ahorrar.

También, podés reducir gastos variables como comida y entretenimiento, o simplemente invertir una porción de tus ahorros. En todo caso, cualquier estrategia que implementes te ayudará a construir una base de dinero para reducir el estrés financiero.

Si tenés deudas antiguas y difíciles de pagar, comenzá por salir del Veraz pagando a plazos. Esto puede parecer un proceso muy complicado, pero con constancia y disposición podés mejorar tu capacidad de pago y más temprano que tarde vas a estar libre de acreedores.

Va a ser mucho más sencillo si planificás tus finanzas y elegís un método de pago adecuado. Por ejemplo, el método bola de nieve consiste en comenzar a pagar la deuda con el monto mensual más pequeño, hasta la más grande. Mientras que el método tsunami se refiere a una estrategia en la que debés pagar la deuda que mayor estrés te genera. Indagá en el tema y elegí el método que te ayude a cumplir tus objetivos en el menor tiempo.

Uno de los beneficios de la educación financiera es que te permite hacer una mejor gestión del dinero e incluso hacerlo crecer con inversiones seguras. Si ya tenés tu presupuesto y planificación, es momento de invertir. Para esto, es importante que investigues el mercado al que vas a entrar, despejá todas tus dudas con asesoría y en cuanto estés seguro/a, da el paso.

Actualmente, en internet circulan muchas plataformas de inversión que prometen dinero fácil y rápido. No es esto lo que tenés que buscar. Tomá en cuenta que ese mercado está lleno de estafas, lo mejor sería invertir en algo tangible con rentabilidad, como Fondos Común de Inversión (FCI) o Plazos Fijos.

Algunos podrían pensar que sacar tarjeta de crédito en la economía actual puede resultar contraproducente, pero en realidad puede convertirse en un gran instrumento si se sabe utilizar. Con una tarjeta de crédito podés realizar compras tanto presenciales como online, pagar servicios o algún imprevisto que surja cuando no contás con débito; retirar efectivo y garantizar algunos pagos automáticos, incluso sin tener saldo en la cuenta corriente.

Las tarjetas de crédito BBVA ofrecen ventajas adicionales, que brindan mayor flexibilidad y control en el manejo de tus finanzas personales.

Para aprovechar los beneficios de las tarjetas de crédito, tené en cuenta los siguientes consejos:

• Preferí las compras de productos a meses sin intereses.
• Pagá tus cuotas puntualmente.
• Evitá usar la tarjeta de crédito para disponer de efectivo.
• Revisá periódicamente el estado de cuenta.
• Conocé los cobros asociados.

Y, por último, seguí esta guía rápida para cuidar tus finanzas personales. ¿Querés saber más? Hacete cliente BBVA y empezá a disfrutar beneficios exclusivos.